En respuesta a las protestas que exigen justicia por el asesinato de George Floyd en todo Estados Unidos, las grandes manifestaciones se han convertido en una oportunidad para que la Patrulla Fronteriza intente presentarse como una fuerza policial capaz de manejar los deberes de un departamento de policía municipal, y deberíamos desconfiar de este desarrollo.
La administración de Trump desplegó un número desconocido de fuerzas policiales militarizadas de diferentes agencias federales. Incluyó a unos 400 agentes de la Patrulla Fronteriza, los cuales se vieron desplegados a través de Washington, D.C. Esto es preocupante porque sugeriría que la Patrulla Fronteriza se dedica a tareas de aplicación de la ley, generalmente fuera de su jurisdicción.
En San Diego, agentes de la Patrulla Fronteriza vestidos con trajes camuflados flanquearon a los agentes del sheriff de San Diego mientras vigilaban un Home Depot en Santee, California, durante una protesta en la que participaron más de 2.000 personas. Otros agentes de la Patrulla Fronteriza estaban redirigiendo el tráfico, una tarea extraña generalmente asumida por la policía municipal local o los oficiales del alguacil.
Para la Patrulla Fronteriza, esto realmente no se trata de control de tráfico, sino de normalizar su presencia para mayores aspiraciones nacionales. Estas aspiraciones parecen tratarse de reconfigurar el mayor organismo de aplicación de la ley en el Hemisferio Occidental como una fuerza policial nacional, expandiendo su jurisdicción desde la frontera hacia el interior.
Esto es peligroso porque la Patrulla Fronteriza tiene una historia de ser inexplicable, opaca y opera con impunidad.
Sabemos que su unidad SWAT, BORTAC, ha ayudado a ICE en las redadas de ciudades santuario. También supimos que la agencia matriz de la Patrulla Fronteriza, Aduanas y Protección Fronteriza, voló su avión no tripulado (drone)alrededor de las protestas en Minneapolis.
Funcionarios de alto rango de la Patrulla Fronteriza publicaron imágenes de sus agentes protegiendo a la policía de “disturbios y otras actividades criminales”. Esto es lo que fue transmitido en un tuit ahora eliminado por el Jefe del Sector de la Patrulla Fronteriza de San Diego, Aaron M. Heitke, donde los agentes posaron con sus armas alrededor de un altar para George Floyd.
A medida que continúan las protestas, debemos estar atentos a los movimientos oportunistas que la administración intentará realizar, especialmente considerando cómo una peligrosa agencia de aplicación de la ley, como la Patrulla Fronteriza, podría posicionarse como una solución policial viable. Aceptar esto sería un grave error que pondría en peligro nuestras libertades civiles y pondría en riesgo más vidas.
