Este ha sido el año más seco jamás visto. El cubierto de nieve en la Sierra Nevada solo alcanza el 12% de lo normal. Es muy probable que no haiga agua de riego proveniente de la Delta de San Joaquin para muchos rancheros del Valle Central. En algunos condados el nivel del suelo cae ya que se remueve el agua subterráneo. Sin agua para las siembras, se calcula que hasta 20,000 trabajadores de campo no tendrán empleo este año. Distritos escolares perderán dinero ya que niños se mueven junto con sus familias en búsqueda de trabajo en otros lugares. El precio de carne de res puede que suba el 40%, y los precios de la leche 50 centavos por galón. 17 pueblos del valle no tendrán agua potable cuando se les sequen las pompas de agua. La pérdida de $5 mil millones de ingresos para granjeros, troqueros, y el procesamiento de alimento causaron que el Gobernador Jerry Brown declarara un estado de emergencia y promovió la visita del Presidente Obama.
En este desierto irrigado, el area agricultor más productivo del mundo, el agua está a punto de ser privatizado y de venta al que pague más alto.
Entrando en el tercer año de sequia, una lucha política que por mucho tiempo se calentaba está a punto de estallar. A la vez que se les culpa a los protectores del ambiente, a burócratas, a pescadores, a rancheros, propietarios de viviendas, todos exigen solución a costo de otros.
Pero escondidos de la vista del público, están otros contendientes de peligro. Son las compañías petroleras, las cuales utilizan inmensas cantidades de agua para la extracción de petróleo y de gas natural desde las profundidades de la tierra en un proceso nombrado “fracking.”
Se sospecha que el Distrito de Agua Westlands vende su agua a las compañías petroleras. Eso que consiguen su agua subsidiada por el público y entonces la venden por ganancia a rancheros y al Sur de California. Si rancheros pagan $30 por 326,900 galones y las compañías petroleras están dispuestas a pagar $3,300 por la misma cantidad, ya se sabe a quien le darán la preferencia los de Westlands. Además el condado de Kern, donde radica el Distrito de Westlands lleva el sobre nombre de “Oil Land.”
Todas las propuestas para solucionar la crisis de la sequia, ya sean de parte de Demócratas o bipartidistas, benefician al Distrito del Agua Westlands, cual es controlado el 49% por billonario Stuart Resnick de Beverly Hills. El tiene fama de hacerles contribuciones financieras a ambos partidos políticos a la vez.
La sequia y las elecciones venideras señalan que estamos sobre una encrucijada. Un camino conduce a la riqueza para billonarios y los políticos que los protegen, a la vez que empobrece y endeuda aún más a los demás de nosotros, además de degradar y perjudicar nuestro medio ambiente. El otro camino consiste en una rotura radical con el sistema de dos partidos principales.
Si Luis Rodriguez hubiera ganado en las primarias en junio, el hubiera sido el único candidato que reconocería que existimos en un balance frágil con nuestro medio ambiente sobre cual nuestra propia existencia depende. Ademas, promueve una promesa de derechos económicos con empleos sostenibles, la reforma financiera, y una democracia verdadera donde la producción es planeada para el bien del pueblo y no para enriquecer a billonarios.
Vote en las primarias de junio para asegurar que el Gobernador Demócrata Brown sea obligado a debatir en contra de un candidato con programa verdadero entre las primarias de junio y la elección de noviembre.