El día 28 de mayo, 2012, se conmemoró, el 2º aniversario del trágico día cuando Anastasio Hernández Rojas, de 42 años de edad, fue golpeado y herido con una pistola paralizante por agentes de la la patrulla fronteriza y agentes federales, en el Puerto-de-Entrada de San Isidro, en el año 2010.
Un programa de televisión reciente de PBS, mostró escenas nunca antes vistas del incidente de hace dos años. Estas escenas lmostraban cerca de 15 agentes federales quienes pateaban, golpeaban, y disparaban con una pistola paralizante a Anastasio, mientras le quitaban la ropa. Anastasio estaba esposado.
La severa golpiza, fue calificada como tortura por el abogado de la familia. La golpiza le causó a Anastasio, su muerte prematura tres días después.
Mientras que su familia recordaba el 2º aniversario con una reunión solemne en una iglesia local, familiares y amigos han estado trabajando incansablemente para que se haga justicia.
La familia de Anastasio — su viuda, padres y hermanos, han estado organizando vigilias con velas y conferencias de prensa. Maria, la viuda de Anastasio, viajó a Los Ángeles, California para reunirse con Jóse Gutiérrez, otra víctima de la brutalidad de la patrulla fronteriza. José quedó en estado de coma por más de tres semanas.
El 10 de mayo, el Día de las Madres en México, la madre de Anastasio, doña Luz, el hermano de Anastasio, Bernardo, representatnes de la Coalición de Comunidades de la Frontera Sur y la organización Presente.org encabezaron una delegación a Washington, D.C. El objetivo fue de reunirse con representantes del congreso y otros funcionarios del gobierno.
Ellos entregaron más de 33 mil firmas en una petición exigiendo justicia al Departamento de Justicia. Con una rapidez sin precedente alguno, convencieron a 15 representantes del congreso, y a un senador para que emitieran una carta dirigida al Departamento de Justicia pidiendo respuestas.
También, solicitaron que se hiciera una investigación completa y exhaustiva. Los legisladores cuestionaron el patrón de violencia de la patrulla fronteriza en los años recientes. Recientemente, en la cuidad de Vista, California, otro padre de familia de cinco, Idelfonso Martínez, de 39 años de edad, fue entregado a agentes de la patrulla fronteriza, por el Alguacil Asistente del condado de San Diego.
Idelfonso, salió a comprar leche para sus hijos(as), y fue parado y cuestionado por el Asistente del Alguacil, después de pedirle que presentara su identificación. Fue deportado y en su intento de regresar con su familia, murió en el brutal desierto de Arizona.
Activistas y defensores, están trabajando estrechamente con familiares y víctimas de la brutalidad de la patrulla fronteriza, para hacer resaltar los abusos a los derechos humanos que ocurren diariamente en las comunidades fronterizas. Como también para lograr cambios en la política de la patrulla fronteriza, para que no sigan los abusos. Para obtener información reciente y más información sobre este tema, visite: soboco.org.