En 2022 debemos redoblar nuestra lucha para corregir lo que está mal en el sistema de inmigración de EE. UU. A fines de octubre, Human Rights Watch publicó un informe titulado, “Abusos Cometidos por Funcionarios Fronterizos de EE. UU.” Este reporta que entre 2016 7 2021 más de 160 reportes fueron entablados por mala conducta y abuso a solicitantes de asilo por agentes estadounidenses.
Human Rights Watch obtuvo documentos después de un litigio en virtud de la Ley de Libertad de Información (FOIA por sus siglas en inglés). Lo cual Incluye denuncias de abuso físico, sexual y verbal, violaciones del debido proceso, duras condiciones de detención, denegación de atención médica y trato discriminatorio en o cerca de la frontera.
Por ejemplo un supervisor en la Oficina de Asilo de San Francisco comunicó lo siguiente:
“AO [oficial de asilo] entrevistó a un niño que fue abusado sexualmente por alguien que creemos que es un oficial de la CBP o de la Patrulla Fronteriza … Fueron detenidos por la Patrulla Fronteriza, enviados a la hielera [una celda de detención], luego … la joven fue obligada a desvestirse y fue tocada inapropiadamente por un guardia de uniforme verde, la etiqueta con su nombre fue [redactada].
Clara Long, directora adjunta de Human Rights Watch en EE. UU. Dijo: “El gobierno de Biden no debería estar dar excusas por los fracasos del DHS y sus componentes, sino más bien, junto con el Congreso debería tomar medidas urgentes para garantizar que las personas víctimas de los agentes fronterizos y de inmigración, incluso por motivos de raza, tengan acceso a la justicia para que este patrón persistente de abuso y mala conducta termine “.
Aquí está el enlace a este importante informe. No podemos descansar hasta que cesen estas atrocidades y se procese a los culpables.