Mientras vimos al candidato presidencial Donald Trump hablarle al reportero Jorge Ramos como un perro con rabia, latinos y norteamerianos decentes están siendo engañados en pensar que Trump tiene algún tipo de solución a sus problemas. La idea de un hombre con personalidad fuerte y con respuestas y atractivo fascista se presenta como si fuera sentido común.
¿Puede el tema de la inmigración ser utilizado aún más para dividir más a los estadounidenses quiénes están luchando en la nueva economía y hacerlos pensar que los inmigrantes latinos son la causa de su miseria? ¿Puede este tema ser utilizado para desviar la atención de los problemas económicos y políticos reales que se enfrenta el país? Este país sin duda enfrenta a una encrucijada, y tenemos que luchar para asegurarnos de que tome el camino correcto – – no de odio y división, pero uno de unidad.
Lo que se necesita es una sociedad diferente, una de cooperación, donde las necesidades de las personas seán protegidas y cumplidas. Lo importante es el ser humano, no las fronteras. Por supuesto países como México necesitan que su propia soberanía sea protegida, pero la gente, no sólo las empresas comerciales, deben poder fluir libremente a través de la frontera.
