Para Marilola Ledesma y Graciela Blancas, su reciente viaje a una conferencia sindical en Sao Paolo, Brasil resultó ser un viaje de descubrimiento. Lo que encontraron fue que los empleados de Walmart en todos estos países gozan de la protección de su afiliación sindical, y los beneficios de los contratos sindicales. Algunos de los beneficios incluyen seguro médico para los trabajadores y sus familias, semanas completas de 40 horas de trabajo, uniformes gratuitos, la mitad de su hora de almuerzo se paga, y los cajeros pueden trabajar sentados. Incluso tienen seguro de deceso, y una clínica médica en la tienda!
Cuando compartieron copias del Tribuno Del Pueblo con sus compatriotas de Brasil, Argentina, Chile y Sudáfrica, se convirtió en un viaje de descubrimiento para ellos también. Estos trabajadores se sorprendieron al encontrar que los trabajadores de Walmart en los EE.UU. no tienen un sindicato, y no gozan de ninguno de estos beneficios. Ellos también se sorprendieron al encontrar que había tantos otros problemas en los EE.UU. que ellos pensaban era un paraíso donde todo el mundo estaba bien remunerado.
Marilola y Graciela fueron patrocinados por la Organización OurWalmart que organizó la conferencia internacional de empleados de Walmart. Ellos asistieron a seminarios donde les enseñan nuevas formas de organizar y pensar. Graciela y Marilola dijeron que varios puntos de vista se les ofreció, para que pudieran elegir lo que les gusta y rechazar los que no.
Sus anfitriones en Brasil fueron dos grandes sindicatos brasileños, la UGT (Uniao Geral dos Trabalhadores) y la CUT (Confederação Nacional dos Trabalhadores No Comercio E Servicos.) Estos sindicatos les invitaron a una manifestación de espíritu con el slogan en grandes pancartas y banderas “Justicia en Walmart “y” luchamos en contra de la dictadura en Walmart, acoso moral, y la persecusión anti-sindicato.”
Estuvieron de acuerdo en que fue una experiencia maravillosa, y una inspiración para continuar su lucha. Ellas asistieron a una conferencia en septiembre en la sede del Sindicato de Trabajadores Rurales Unidos en Keene, Calif. donde pueden compartir lo que han aprendido en Brasil.