Maestros en huelga en México: Un ejemplo para todos nosotros
María Jesús Estrada, PhD
Imagine a maestras/os en huelga durante semanas para oponerse a las pruebas estandarizadas. Imagine a maestras/os tomando tubos de metal para defender sus derechos de tenencia. Imagine oponerse a la brutalidad policial con piedras para defender el pensamiento crítico y la libertad académica. ¿Hasta dónde deben las y los maestros, madres y padres de familia y alumnas/os, proteger sus condiciones de trabajo y defender sus escuelas? Esta es una cuestión que la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) ha estado lidiando por más de dos meses.
La CNTE, un grupo militante del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) ha luchado contra las reformas educativas del presidente Peña Nieto. Durante semanas, los profesores de las diversas zonas rurales de estados como Oaxaca y Michoacán han convergido en la Ciudad de México para oponerse a Peña Nieto y su versión de No Child Left Behind, la cual efectivamente arruinará el sistema educativo en México y sin duda destruirá a otro sindicato.
Este año, a mediados de septiembre en la Ciudad de México en el Zócalo, la policía brutalizó a los manifestantes con cañones de agua y macánas. En el mes de octubre en Oaxaca, la policía confrontó a las y los profesores y a las y los estudiantes, y su manifestación fue disuelta a la fuerza. Una y otra vez, la policía ha interrumpido o detenido los manifestantes durante sus acciones. Sin embargo, la oposición a la CNTE no se ha detenido allí.
Más recientemente, en Tepito en la Ciudad de México los propietarios de pequeñas empresas agredieron a tres miembros del CNTE porque los propietarios culparon a los manifestantes por la disminución de las ganancias. En Michoacán, el gobierno canceló todos los contratos con las y los profesores en el grupo; las autoridades afirmaron que los sueldos siguen congelados hasta que el ciclo académico sea rectificado.. Lo qué es repugnante es que el principal sindicato, el SNTE, ha apoyado abiertamente las reformas educativas del Nieto.
Hasta la fecha, ningún partido político se asocia a la CNTE, y todos los partidos políticos apoyan ciegamente a las reformas de Peña Nieto como beneficiosas para las y los estudiantes. Sin el apoyo del gobierno o el liderazgo sindical de la SNTE, no es extraño que estos valientes maestros y sus aliados estén luchando por todos los medios necesarios. Aunque la mayoría de ellos han vuelto al trabajo, la lucha por derogar estas reformas no ha terminado.
Sin embargo, en un sistema económico (como el nuestro) con miras para mayor privatización de la educación, ¿cómo es que este pequeño grupo prevalecerá? El aumento de las pruebas estandarizadas no sólo “simplificar” la educación de los estudiantes, sino también llenaran los bolsillos de las empresas que crean estas pruebas.
Por otra parte, las escuelas que ya están bien financiadas estarán mejor que las escuelas pobres que la CNTE representa. Ya, la división entre los ricos y los pobres limita el acceso de los estudiantes pobres a la escuela.
Bajo estas condiciones económicas y sin ninguna representación política a la vista, este valiente grupo no tiene oportunidad de ganar. Sin embargo, su valentía y determinación debe ser una inspiración para todos nosotros, porque saben qué es lo que está por medio, a pesar del terror de Estado y la continuación de los ataques.
Con piedras y tubos de metal, estas/os maestros están de pie ante un gigante, la lucha por el derecho fundamental a una educación integral para todos. Ella y ellos están solos, por el momento, pero con el aumento de legislación contra los pobres y las y los trabajadores, tal vez este pequeño grupo será el líder de una lucha política mucho más grande, y ganará.
