El 20 de enero de 2011 ICE anunció la formación de una nueva unidad para extender las Auditorias I-9 – agentes adicionales dedicados a continuar y expander las “redadas silenciosas.” Ellos supervisaran la terrorización y persecución de millones de trabajadores indocumentados y de sus familias y comunidades.
Está persecución continuada engendra una política inmigratoria que es sujeta a la ley de la muchedumbre por los “patriotas” del ala derecha. Es liderada por una campaña mediática para debilitar los derechos legales de los trabajadores. Todos los trabajadores.
Encaramos una crisis de los derechos humanos del primer orden. Y en los Estados Unidos como en todas partes, si alguien no es libre, nadie será libre. Lo sindicatos laborales, organizaciones comunitarias y sociales, y grupos Pro derechos inmigratorios no pueden seguir la misma política de siempre.
Los líderes de muchas de estas organizaciones y los políticos han visto sus responsabilidades como negociar los términos de estos “sistemas de verificación” y no oponerse a ellos. O han estado conforme con marchas o acciones simbolizas.
Esto no es aceptable.
En los últimos cinco años, cientos de miles hemos marchado y marchado, hemos hecho apelaciones a los políticos – tanto demócratas como republicanos. Pero se rehúsan a tratar con los asuntos humanos y morales.
El Concilio de la Ciudad de Chicago recientemente enactó una resolución llamando por un moratorio de las deportaciones – otra acción simbólica.
Esto no es suficiente.
El sistema de inmigración está roto. Está destruyendo familias y debilitando los derechos de los trabajadores. Debe de haber un moratorio nacional en todos los sistemas de “verificación” y las redadas. Mas que eso – la legalización plena debe ser extendida a todos los inmigrantes.
El Tribuno del Pueblo llama a todos los líderes y a toda la gente concerniente a empezar pláticas inmediatamente sobre un plan nuevo para nuestro movimiento. Los alentamos para tomar conciencia de que la orden del día más importante es buscar la manera de como luchar hombro con hombro con todos los trabajadores, nacidos aquí, con documentos o no, por nuestra supervivencia diaria.
Únicamente al hacer una causa común con toda la clase trabajadora podrá la clase trabajadora tomar nuestra lucha.
Anticipamos participar en éstas pláticas y en las tácticas y estrategias nuevas que surgirán de ellas.