“Empoderar a nuestras comunidades y continuar unidos con más fuerza”
(Nota del editor: El Tribuno del Pueblo recibió la siguiente carta – que aquí se resume – poco tiempo después del intent de asesinato de la Congresista Gabrielle Giffords a principios de enero.)
La tragedia del sábado [8 de enero, 2011] en Arizona aturdió a muchos. Como nación, debemos sostener una conversación muy necesaria sobre el hecho de actuar responsablemente y darse cuenta que la retórica tiene sus consecuencias.
La comunidad latina e inmigrante ha estado plagada de las peores palabras y, en algunos casos, de verdaderos actos de violencia impulsados por el odio.
Hasta el alguacil del Condado de Pima, Clarence Dupnik, en Tucson, Arizona – que no es el mejor amigo del movimiento a favor de los derechos de los inmigrantes – tuvo razón cuando señaló que:
“El enojo, el odio y la intolerancia que están sucediendo en este paísestán llegando a ser indignantes y, desafortunadamente, creo que Arizona se ha convertido en algo así como… la meca del prejuicio y la intolerancia”.
Debido a este punto de vista, que refleja mucho sentido común, los expertos conservadores lo han atacado y se le ha marginado en los medios decomunicación, ya que ha surgido un esfuerzo por desviar el enojo y el temor de los verdaderos problemas – y no cabe duda que ello ha dado origen a un entorno político polarizado.
Sabemos cómo es que se nos ataque y nos hagan que sintamos un temor mutuo. Hemos observado un aumento del 35 por ciento en los crímenes motivados por el odio contra los latinos. Y en el período que precedió la aprobación de la Ley SB 1070 en Arizona, observamos los indicios racistas que utilizaron los activistas antiinmigrantes. Nos asqueó la retórica que demonizó y deshumanizó a los inmigrantes y los latinos.
Mientras tanto, las deportaciones han batido records. Asimismo, continúa la ampliación del programa 287g, el cual faculta a las agencias locales y federales de seguridad a aplicarla ley federal de inmigración y a desgarrar a las familias.
En vez de ello, debemos centrarnos como nación en la solución de la crisis migratoria, y no en aumentar el problema con soluciones que crean más temor en nuestras comunidades.
Leyes como la SB 1070 in Arizona, las propuestas de ley que la imitan y que se están presentando en las legislaturas estatales a lo largo del país, al igual que el debate sobre la revocación de la decimocuarta enmienda por parte de los estados, que adjudica la ciudadanía estadounidense a cualquier persona que nazca en este país, son una exhibición inmoral que sólo sirve para polarizar una comunidad contra otra, y para llenar los bolsillos de los grupos que están perpetuando esta farsa.
La gente está buscando respuestas y medios para superar esta tragedia. Además de rezar – de cualquier forma que decidan hacerlo – por las víctimas y por quienes todavía luchan por su vida, por favor dediquen un momento a transmitir este mensaje.
La única forma en que vamos a superar esto y a construir un mejor país es si empoderamos a nuestras comunidades y nos mantenemos unidos con más fuerza, como si fuéramos uno solo.
Gracias y ¡adelante!
–Joaquín, Laurie, Favianna y el resto del equipo de Presente.org.
